La visita se desarrolló entre el 30 de septiembre y el 11 de octubre y contribuyó de forma efectiva a la interacción de los grumetes con otra marina y modelo formativo.

 

Durante la comisión la delegación conoció las dependencias de la escuela, visitó unidades y reparticiones de la Armada colombiana en el Caribe, además de lugares históricos y turísticos, lo que en palabras de la Grumetes Solange Romero de la 1° División “fue una experiencia inolvidable, que espero se convierta en una tradición, una semilla que germine y crezca en futuras generaciones de grumetes, para que muchos más tengan la oportunidad de enriquecerse con el intercambio cultural y la posibilidad deforjar lazos inquebrantables con camaradas de otras armadas”.

 

Del mismo modo el Grumete Yonatan YAÑEZ, de la 2° División señaló “La experiencia que viví en la Escuela Naval de Suboficiales de Barranquilla fue magnífica en todos los aspectos. Desde esa cálida bienvenida que nos dieron al llegar, pude comprender la importancia de conocer otras formas de trabajar y otro tipo de régimen, pero que al igual que en nuestra Escuela de Grumetes, buscan enseñar y formar al amparo de la doctrina militar.

Tuvimos la oportunidad de conocer sus fragatas y submarinos e instruirnos sobre las funciones, capacidades y otras características de éstos. Pero no todo fue escuela, ya que visitamos lugares turísticos de este país que nunca imaginé, y menos siendo aún grumete”.

Grumete Florencia FUENTES, 6° División

“Al recorrer la escuela me pareció bastante amplia y amigable, estatuas como la del Almirante José Padilla López, una gran pista atlética, sala de computación programada para los grumetes que se especializarán en esas áreas, etc. Todos eran muy respetuosos con nosotros, preocupados siempre de tenernos en un lugar fresco debido a nuestra falta de costumbre a ese clima; comidas exquisitas, con las que nos sorprendían cada día”.

 

Grumete IM Juan Salvo, 7° División

“Recorrí las instalaciones, donde se respiraba el compromiso y la disciplina. Observe aulas equipadas con tecnología y simuladores, diseñadas para preparar a los futuros marinos. Sin embargo, lo más emocionante fue conocer su cultura y gastronomía, ya que es totalmente distinta a la nuestra, a pesar de que el régimen diario es muy similar. El clima es tropical, por lo que a pesar de la lluvia, nunca dejó de hacer calor”.